Etapa ANODINA Y PESADA. Sin gracia, tediosa en los
últimos km y sobre todo la entrada a Santiago. Deberían poner un bus o algo y
evitar el mal rato. Eso si, entrar en la plaza del Obradoiro sigue siendo
emocionante, con su gaiteiro tocando y los peregrinos llegando.
Emociona ver a la gente abrazarse después del camino
y echarse las fotos ante la catedral. Por desgracia están en obras y la fachada
está cubierta de andamios.
Por el aeropuerto vi el cartel que algún peregrino
ha resumido en lo que se está convirtiendo el camino en general y el francés en
particular en los últimos tiempos. UNA BICICLETA + UN PEREGRINO = BUEN TURIGRISMO.
Triste pero cierto. Algo habrá que hacer pero la economía es la economía, el
negocio es el negocio. Aquí no hay playa pero hay peregrinos…
Eso sí, madrugamos porque nunca habíamos estado en
la misa del peregrino. Muchísima gente, no sé cuantos curas de no sé cuantos
sitios, una monja animadora, … Emocionante y curioso. Sentado junto al altar
mayor sobre una columnata de piedra pude contemplar parte de la misa en un
lugar privilegiado. Luego, en el sermón me fui a ver y abrazar al Santo y
cumplir el rito.
Fuimos a comprar algunas cosillas de recuerdo y vino
Jesús para estar con nosotros en Santiago. Nos encontramos en el mercado de Santiago, un
lugar muy recomendable, mientras hacía acopio de productos de la tierra. Me
encantan los mercados, a donde voy y hay los visito.
Sellamos la Compostela por la tarde, después de
comer, más compritas y a recoger el coche porque dormíamos en Tui.
Aquí acaba un camino más, que esperemos no sea el
último. Y como la vida, trajo cosas buenas y cosas malas, esfuerzos y risas,
gente que va y viene, recuerdos y emociones. Momentos mágicos y momentos
amargos. Risas, lágrimas y emociones. ¿No es eso la vida?
UN ABRAZO Y ¡¡¡¡BUEN CAMINO!!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario